En el mes de la conmemoración del día de la mujer, destacamos el trabajo de Carol Gordillo, encargada de bodega NORACID

Carol Gordillo lleva una activa vida laboral en NORACID. Equipada con una sonrisa afable, le cuesta mantenerse quieta. Y es que, junto a su compañero Wilson Vinacha, debe velar por todo lo que sucede en torno a los elementos que almacena la empresa para su buen funcionamiento. Desde fines de 2022 es encargada de Bodega de la compañía, lo que implica supervisar los recibos y despachos de materiales, manejar la grúa horquilla, mantener el orden, catalogar los ítems, controlar el stock y gestionar la reposición por parte del área de compras, entre otras labores.

No es una tarea simple, hay 14 bodegas independientes y especializadas en diferentes tipos de materiales, se manejan más de 6.000 códigos de piezas, de los cuales 1.419 corresponden a repuestos críticos. El desafío está en saber qué es lo que hay y exactamente dónde están, para así recurrir a ellos con facilidad y prontitud.

“Lo primero que hicimos cuando asumí el cargo fue digitalizar el despacho de materiales, ya que todavía se manejaba con papeles. Después comenzamos a trabajar en el ordenamiento de todas las bodegas. Es un proceso largo en el que todavía nos mantenemos ocupados. Teníamos muchas cosas almacenadas que no estaban en INFOR, que es la plataforma que manejamos, por lo que debíamos catalogarlas e ingresarlas, de manera que el software converse adecuadamente con los elementos físicos”, explica.

El crecimiento profesional de Carol ha ido de la mano con su desarrollo académico. Gracias a su esfuerzo y al apoyo de NORACID, se capacitó en el manejo de maquinaria pesada y, además, cursó durante dos años y medio el Técnico de Nivel Superior en Gestión Logística en IPG. Actualmente, se tituló de Ingeniería en Gestión de Operaciones Logísticas en AIEP.

Con cerca de una década vinculada a Mejillones y a la empresa, está contenta y agradecida. “Este tiempo –reflexiona– ha sido de un crecimiento integral como persona, laboral y económicamente. NORACID ha sido seguridad y tranquilidad. Prácticamente, crie y eduqué a mi hija trabajando acá. Para mí ha sido un muy buen lugar”.